- Y a qué vamos a aferrarnos entonces corazón, no pretendas pasar toda tu vida apretando ese trozo de lata den tus manos porque...
- Porque moriríamos en la espera... lo se.
- ¿Entonces me entiendes?
- Si, pero no puedo permitir que lo lleves a entrar en esta guerra.
- Claro que podemos...
- No!... recuerda aquel invierno, recuerda los gritos, el derrumbe y la pena... recuerda el frío y el hastío, recuerda la sangre con la que firmamos ese pacto...
- Al diablo con el acuerdo... al diablo tú ciego corazón.
- No puedo permitírtelo, no lucharé otra guerra por amor, no volveré a ponerlo en ninguna bandera de carga, el amor no es una excusa para ver a mis hombres morir razón... el amor no es guerra, es paz y si la paz no nace...
- Pero si la esperas vamos a perderla.
- Deberemos seguir entonces, sin ella...
- No puedo creer lo que dices, debería cortarte aquí mismo la cabeza... lo sientes, pero vas a dejarlo morir...
- Vamos a dejarla volar, a ambos... eso hace que...
- La dejas morir, sabes que peligra tras esas rejas.
- Pero es su lección salir, no tenemos nada que hacer por ella....
- Puede ayudarla, podemos...
- No necesita nuestra ayuda, es mas...
Al diablo contigo, vete ahora mismo de mi reino, toma el camino mas rápido, alerta a tus hombres... esta misma noche pondré hasta la ultima de las almas que ocupan este lado del reino frente a tu fortaleza y tomaré el control...
- No puedo dejar que hagas eso, razón, deben seguir sus caminos, escúchame...
- Guardias!!!, saquen a este idiota de mi vista, escóltenlo hasta su castillo, y véanlo bien, graben esa imagen en sus mentes, pues para mañana no será mas que un montón de cenizas y escombros.
- Aguarda un segundo -grita el corazón, mientras lucha por liberarse de dos grandes recuerdos que lo fuerzan a salir del salón - aún estamos a tiempo de solucionar esto, no lo hagas...
- Tienes 12 horas Corazón, voy a arrasar contigo y con cada ser de este cuerpo que se cruce en mi camino... no volverás a molestarme...
- Aún no es el momento razón, ten calma...
un sordo golpe lo deja inconsciente al corazón, que ahora es arrastrado por un largo corredor, camino a las afuera del palacio...
- Mi señor ...¿Qué ha sucedido? - pregunta la esperanza al confundido corazón, mientras ve como los guardias que lo dejaron en la puerta del castillo se alejan rumbo al norte...
- General - responde este poniéndose de pie - alerte a los hombres, de inmediato, van a atacarnos...
con un gesto de respeto la esperanza se pierde por la puerta del castillo, suenan agudas campanas... gritos... corridas, metales que chocan...
Minutos después, el corazón a llegado a la torre mas alta, su cuarto a la altura de los ojos brilla, como si cada pared fuera inconsciente de lo que está por suceder.
Sobre la cama, su armadura carmín brilla resplandeciente... jadea unos segundos, sus ojos se llenan de lagrimas.
Lentamente toma su espada, la quita de su funda y de un veloz movimiento corta una especie de soga que descansaba sobre la mesa de luz... se acerca con la espada pesando en su mano izquierda, abre su cajón y deja caer dentro de este, un pequeño dedal...
Una lagrima se pierde al caer en el oscuro cajón.
- Perdóname, lo intentamos... pero me temo que todo comenzará una vez mas...
Aún suenan las campanas, las grandes puertas del reinos se ven, tantos años después, nuevamente cerradas, pequeños destellos de armaduras lo llenan todo allá abajo...
Cierra de un golpe el cajón, la impotencia y el miedo se mezclan en su rostro... Termina de vestir su armadura y se pierde por la puerta del cuarto, se dirige velozmente al centro de mando...
...
[Lo siento, todo mi reino lo sentirá... pero no puedo dejar que esto valla más allá de este campo de batalla]
