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31 julio, 2013

Volver II

Volver, como empujado
a la poesía,
a las rimas, de este mundo
disonante.
Escribir versos, preguntarme
cada día
cómo es entregar la vida
en un instante.

Buscar en la pantalla
como un loco,
ese algo que me quite
los enojos.
Descubrir toda la magia, 
dulcemente
en el calido reflejo
de tus ojos.

Entregarme a la espera,
simplemente,
porque hay una certeza
que respira
en ese algo que seremos
plenamente,
por diez minutos o para
toda la vida.

30 julio, 2013

aleuyaR

Es como saltar hacia a atrás por momentos. Como si la Rayuela comenzara al revés, y la piedra y mi zapato no dieran margen de error que me permitiera demorar, aunque sea unos saltos, la caída a la tierra nuevamente.

Del siete al seis y al cinco, de vuelta a los horarios y al colectivo hasta la Rodríguez Peña. Un salto mas, al cuatro de los almuerzos en la oficina, y al tres y al dos de las charlas de sobre mesa en casa... la nada misma.

Nostalgia de un cielo reconocido por algo mas que los sentidos, tal vez un centro que, por primera vez en esta vida (y en todas mis vidas) fue cruzado de lado a lado por eso que todos nombran pero que nadie comprende. Un salto mas, uno, y tierra. El vino con los amigos, los cigarrillos Uruguayos, la sed de besos, y estos escritos... Tierra.

Tengo una profunda certeza de que hay algo conquistado, probablemente no merecido, pero ganado a fin de cuentas. Algo que trasciende a todas las cosas y que difícilmente se pueda explicar con palabras, pero volver...

Decir volver, es decir que todos los que soy (o al menos la mayoría) vuelven conmigo, que hay un atentado constante de la máquina que busca borrar toda marca de esas dos o tres baldosas de paraíso sobre las que me encuentro.

Feroz es la lucha, o tal vez así se percibe desde el lado mas débil, que es el mio, que es el que a duras penas puede hacer algunos intentos, refugiarse en algunos solos de violín, silenciarse en algunas respiraciones bajas, observar.

Sería mejor contar con una AK-47, lo se,  pero la mejor arma que poseo es observar, armoniosamente, activa y pasivamente observar. Desgarrarme de a ratos ante la imposibilidad de derribar a un solo soldado enemigo, horrorizarme de mis horrores, tal vez, hasta encariñarme con ellos, hasta ser capaz de abrazarlos.

Esquivar bombardeos de juicio y tensiones en los hombros que aparecen como grupos comando, saboteando hasta los momentos mas sencillos, y la ira y la mentira y...

Hay algo que falta en el frente enemigo, sus murallas están mas bajas o, al menos desde aquí, se perciben mucho mas vulnerables. Algo a sucedido, algo en su estructura ha por fin cedido, mas a la humedad y al viento que a mis ataques (que son contados con una mano).

Tal vez no todo esté perdido después de volver... al menos permanece en mi boca (y en las bocas de todos los que soy) ese sabor "distinto", ese algo nuevo... Una excusa de Grial que, sin dejar de ser excusa, me empuja un poco mas hacia esa búsqueda que se continúa en la tierra pues a fin de cuenta Cielo-Tierra no son dos reflejos conectados por una serie corta de números, de saltos en un pie.

No me aseguro nada, no me prometo nada, solamente, y esto es una enorme suposición,  la posibilidad de buscar de nuevo ese sabor que no comprendo, ese algo que probé , y entre tanto buscar y tanto volver , por qué no, poder disfrutar del viaje de vuelta.

29 julio, 2013

Volver

El perro, el Gato y las plantas están bien, ¿por que será que vemos to mas grande un instante después de la distancia? que acotada percepción de los demás, eso es lo primero que me sucede.

¿En que momento se puso tan pesada esta valija? ¿Será el poncho? ¿Cuántos escalones hay hasta mi pieza y por qué, ahora que vengo cargando la valija, decido ponerme a contarlos?. Eso es lo segundo que me sucede.

Lo tercero que me sucede, es el encuentro.

Abrir despacio la puerta que me saluda con un crujido, subir la pesada valija un escalón mas y encender la luz. Ahí esta, ahí estoy, sentado a los pies de la cama, cerquita de la estufa estudiando un papel de cigarrillo con atención. Sabe que estoy mirándolo, pero no dice nada, ni siquiera levanta la mirada, ahora entiendo por que no viajo conmigo.

Comienza a enrollar el papel, y entonces recuerdo que al irme lo deje sin tabaco, primero la culpa, después, la búsqueda de redención, que comienza con sacarme la bufanda, crujir un poco el cuello y encender la pava eléctrica (otra que me saluda con un burbujeo sencillo).

Armar el mate, una ramita de Canela (me lleva exactamente 4 minutos preparar el mate para que quede así como le gusta, como nos gusta, que difícil dejar de polarizarnos. Pero el mate está listo.

Me tomo el primero, el agua está un poco caliente pero zafa, el ruido del último sorbo despierta su atención, se endereza y me mira, o eso supongo, yo estoy de espaldas acomodando la valija para usarla de asiento cerca de él (alguien sacó la silla de mi cuarto, acordate de preguntar mañana dónde quedó).

Agua de nuevo, la yerba se ve hermosa, el frío pierde terreno, estiro la mano y le alcanzo el mate. Lo recibe, lo estudia y se sonríe, es como mirarse al espejo).

- Te dije que esa pava calienta demasiado el agua - dice como si las palabras se le cayeran de la boca.

Pero no es lo primero que me dice, desde que entre no ha parado de hablarme, es como si de alguna manera pudiera estar en su cabeza y escuchar sus pensamientos que van del "¿por qué se dejó así la barba?" al "cambió de marca de cigarrillos, eso que sobresale del bolsillo del bolsillo es un 20" o también, "¿qué es ese aroma que trae?" y "sus ojos están distintos".

- Veo que no has salido de la habitación - le digo
- De alguna manera vos tampoco saliste nunca de acá.
- Exacto, ¿a que vienen esos gestos entonces?
- a que hay algo distinto
- ¿cómo que distinto?
- no se, distinto - dice alzando la voz, mirándome a los ojos por primera vez desde que llegue, mientras me alcanza el mate.
- Explicate un poco, sino...
- Hay uno o dos encajes que no están
- ¿Encajes? ¿dónde no están?
- si si, encajes, como los de las piezas del rompecabezas, no están más adentro tuyo te las tenes que haber dejado en alguna estación de servicio.
- y que hay con esos encajes
- ¿qué hay?... nada, - dice sacudiendo la cabeza y volviendo a su papel de cigarrillo - solo que no voy a tener de dónde agarrarme ahora.
- Te sostenían esos enganches y ahora ya no están, no vas a poder volver a subirte. ¿eso me decís?
- Mas o menos, si puedo volver a subirme, siempre voy a poder, pero no va a ser tan cómo como antes, voy a estar mas lejos de los ojos, como de costado, eso hace todo mas difícil viste.
- Te entiendo, pero te vas a acostumbrar.
- ¿no lo hacemos todos?
- Tomate otro mate y subite, que hay que desarmar la valija.
- Podrías dejarla así y mañana bajar todo para lavar, no creo que traigas nada limpio, salvo el poncho.
- Que buena idea, vení, fumemos un cigarrillo mientras de acomodas, estos te van a encantar.
- ¿Coronado? son los de esa noche.
- Los mismos, vos y tus caprichos.
- Nuestros caprichos.
- Que buenos son - dice tirando el humo - Bienvenido, te extrañé.
- Lo se, yo tampoco me extrañaría, pero cada quien cumple su papel, como un juego viste.
- Lo veo, creo que incluso un poco más que antes.
- De eso se trata, toma y dejame la última seca, me tengo que acomodar acá. ¿soy yo o hay mas lugar que antes?
- Todo está como siempre creo.
- Crees mal, es el mismo juego, vos no sos el mismo.
- Juguemos entonces.
- Dale, pero no dejes afuera a cuky, te a extrañado mas que todos.
- Gracias por cuidarla, toma quedan dos secas.
- Gracias che, hasta mañana.
- Hasta mañana.



Y mientras se duerme me siento a escribir, a tomar unos mates mas, y a revolverme la cabeza (sin hace mucho ruido para no despertar a nadie) con esto de volver y ver a todos mas grandes, de contar escalones en vano y de encontrarme a los pies de la cama.

Ir y venir, creo que el Trabajo comienza ahora. Como que pase estos 10 días en la ruta, y ahora que he llegado, comienza, por así decirlo, lo nuevo.

Que rápido se enfría el agua en este termo, mejor la corto con el escritor y el mate y me voy a la cama. Re leo, corrijo, publico... y tu nombre. Se me vuelve encima, como estrella, como risa al viento. Tu nombre... de eso mejor escribo mañana.



18 julio, 2013

Cualquier título es bueno.

Viajar, Buscar... no importa que palabra le quede mejor, mientras sigamos en movimiento cualquier título es bueno.

De alguna manera vos y tu risa infinita vienen conmigo, así que viajamos juntos. No lo se, pero es que ya sos parte de ese algo superior, que define por nosotros las cosas. De esas leyes que no alcanzamos a comprender pero que nos afectan a todos. Eso a lo que estamos sometidos de pura humanidad y sin vislumbre alguno de deidad.

Eso, que apenas logro nombrar,  hace que sienta que estamos unidos por cada Quantum de energía que nos forma. No lo se explicar de otra manera, pero está ahí, en ese poema que lees, en ese capítulo que tanto te gusta, en esos sueños de mundo nuevo y revolución, en fin, en todo... en nosotros.

Nosotros, que manera simplista de con jugarnos, tanto mas hay detrás de las barreras de arena y sol  que separan nuestros cuerpos. Todo lo que sucede en otros planos y que nos es apenas perceptible, como destellos, en algunos sueños.

Sueño. A eso se parece todo esto, a una proyección interminable de camino a la era nueva. Voy a abrazarte profundo en la noche del día fuera del tiempo, yo del otro lado del río, tu cerca del fuego, profundamente.

Lunas nuevas, nuevos sueños.

Perdón amor, es desprolijo este escribir por puro impulso, este dialogo inaudito entre lo que siento, lo que sientes y esa espectral figura que en la noche nos nombra, como si fuésemos un solo ser, como si la consagración de los sentidos fuese algo inminente, como si la separación, entre tu y yo, ahora que nos hemos visto realmente, hubiese al fin desaparecido.

Viajar, Buscar... no importa que palabra le quede mejor, todo es movimiento ahora que te siento conmigo... cualquier titulo es bueno.

A fin de cuentas, solo es mi turno de tirar la piedra y saltar en una pata, nunca fui bueno para esto, pero debe ser por eso que me gusta tanto. La dificultad, la cuasi certeza del fracaso. No lo se, me entusiasma saber que mientras salto, y presiento que en el 3 la piedrita se me va a escapar de nuevo, me estas esperando con un abrazo y con un mate, tiza en mano, para dibujar el camino al cielo una vez mas.

Viajar, Buscar... como si se pudiese elegir entre uno u otro, sinónimos inadvertidos. Como si algo de todo esto pudiese elegirse...me doy risa (se que a vos también), pero eso es lo mágico, es es lo que hace que cualquier título, para este todo/nada, sea mas que bueno.


"...Como si se pudiese elegir en el amor, como si no fuera un rayo que te parte los huesos
y te deja estaqueado en la mitad del patio..."




17 julio, 2013

Revolución

Lo maravilloso, lo mágico de todo esto (sin duda es más magia que otra cosa) es que de tanto que quiero decir, no se me escapa una sola palabra con la claridad suficiente para describir ese "no se qué" del alma.

Estado nuevo, plenitud del alma, ansia de besos, miles de ideas y deseos prestos a convertirse en arrebatos peregrinos para volver hasta tu puerta, hasta tu abrazo, tal vez un poco más allá, tal vez hasta tus besos.

Pero acá estamos...vos escribiendo de amor, yo encendiendo otro cigarrillo y sin saberlo, a uno y otro lado del desierto comienza a gestarse un mundo nuevo... Un mundo que no se a ciencia cierta si seremos o no, pero que si puedo asegurar que, sea lo que sea, será eterno.

Crear lo eterno, lo insoluble, lo que va a llenar todos los rincones. En fin, un mundo nuevo.

No, no me preguntes (ni te preguntes) cómo... no creo que existan mas explicaciones mas allá de esas miradas, esas risas o esos mates. 

Estás tan acá. O tal vez yo estoy muy allá, el tiempo/espacio funciona de una manera extraña estos días. Me desdoblo, como si fuese un sueño (un sueño dentro de otro sueño) y es tal la claridad de ese espacio, ese caer constante al vacío, al fin sin esperanza de alas que crecen, de planeo de águilas azules... simplemente caer, casi flotando, pero a fin de cuentas cayendo... sabiendo que al vernos, es decir, cuando realmente lleguemos a vernos, no con los ojos, sino con el alma, tocaremos fondo y el estallido de ese encuentro de nuestras almas va a destruirlo todo... estructuras, dudas y miedos... todo por igual.

Nubes de polvo, sincrónico, nubes de orgasmo... la pasión desmedida y el inicio, en una plaza y media, de la única revolución sinceramente posible, la de nuestro ser volviendo a ser uno después de tantos años, separado, buscándose, perdiéndose... en fin, revolución de amor, la única de las revoluciones que nos será posible concebir.



16 julio, 2013

Tu Risa

Tu risa, sin querer, apaga las luces y tira por el piso el gran esfuerzo que este mundo hace por opacar la magia de las noches como hoy.

Pero vos, te reís, rompes todo y nos rompes a todos porque tu risa nos recuerda (me recuerda) que hace tiempo perdí, en otro circo como este, esas ganas de... esa facilidad, para hacer caso omiso de las luces y del ruido, y sin querer, romperle el mundo a todos, con la risa.

Los nuestros serán, los hijos del nuevo mundo,
 es decir, nuestras historias,
nuestros besos, nuestras flores.

Puentes

Caminar despacio, entre los colores, las luces y el ruido... Perderse y de repente, reencontrarse en un apellido común, en la tapa de un libro que mira con ojos de regalo y por un instante, en ese encuentro, volver al hogar.

Tal vez la sutil función del escritor sea crear, sin saberlo, estos puentes... para que una noche cualquiera, entre el ruido, las luces y los colores,  algún perdido de apellido poco común, se reencuentre y pueda volver a casa.

"vagabudeá, vagabudeá, pero no pierdas ritmo,
que es la luz, que el lirismo no te haga equivocar
el paso, que así como caminas, eres"(L.Lamborghini)

10 julio, 2013

Arte

Despacio entre tus dedos la pintura
va dejando un atisbo de colores
dibujando del paisaje los sabores,
dando vida al muerto lienzo que respira.

Se encienden, se hacen luz, para que sigas
dibujando, tus ojos transparentes,
no precisas del tumulto de la gente
te sobra con primarios y matices.

Disfrutas entonada entre los grises
dando formas y sabor a ese poema,
se hacen verso las figuras que definen
tus manos, como un fuego que no quema.

Infinita realidad, ya no hay pasado,
el futuro es un buen chiste por contarte.
Vives aquí, el reloj luce oxidado,
ya no mueres porque tu Tiempo es el Arte.


Foto: Juli Tornello https://www.facebook.com/juli.tornello

Desordenadas

Desordenadas y vacías
las palabras arremeten,
suicido vanos comenten
las emociones del día.

Pilar de vaga agonía,
cristal efímero y puro,
silencio de un gris oscuro,
vislumbre fatal de inconsciencia.

¿Podrá el amor con su ciencia
acallar tanto ruido de nada,
devolverle color a las hadas,
componer una nueva canción?

O tendrá que, por sí, el corazón
caminar de mi cama a tu cama,
para hilar de tu mano la trama
que nos tiene esperando a los dos.




("Amor, ese algo que percibes cuando lees, en tu rincón del mundo, y sin querer las letras y las flores se te hacen agua a la boca, y entonces me nombras... y entonces te intuyo. 
Amor, ese algo que intuyo, que percibes... que sentimos.")

07 julio, 2013

Desolado...

Es desolador este paisaje... o al menos lo que queda de ese paisaje, es desolador.

Tan acostumbrado a la fantasía, a lo ficticio, al valor de las cosas solo por su color, a no probar de lleno los sabores...

"Acostumbrado", que palabra que describe cada rincón de ese paisaje, ahora montón de cenizas, ahora vacíos inexplicables, ahora una nueva búsqueda, ahora el fin.

Y no se si es tristeza, o bronca (tal vez sean las dos), se que no es miedo... que desilusión verme tan desnudo de verdades, tan desprovisto de Ser, tan falto de conciencia... Desoladora, es una imagen desoladora. Tal vez morir... no ni-si-quiera morir es justo, no alcanza, es demasiado, morir es demasiado.

Entonces ¿volver a empezar?... no, porque para eso tendría que haber comenzado otras veces, y no es así, fueron siempre reacciones, mecanismos, modismos... el típico estímulo respuesta, la nada de la esencia disfrazada de emociones, que eran pensamientos llenos de imaginación, que eran ensueños... que eran nada.

Nada... Ver, buscarme en el paisaje tan familiar y no ver nada. Bendición de ceguera, Maldición de la distancia que comienzo a sentir.. ¿habrá algún lugar posible ahora?

Tantas disculpas debo gritar, escribir y cantar para que lleguen a esos ojos, y esas manos... a esos vientres y a esas bocas... perdón, perdón, perdón...
tantas soledades, tantas desdichas, tanto odio a diestra y siniestra solo porque esa era "la única" manera de actuar. Válida, pero vacío y pestilente excusa del alma.

Desolado... desesperanzado... dolor, necesario dolor.

Ni una coma real en 230 textos, en 11 años de blog, en 25 años de historia, en miles de amores... ni una coma de real... reflejo y consecuencia, arriba y abajo... víctima, victimario.

Tan grande ha de ser la explosión que ponga fin a todo esto... no es posible siquiera concebirla... Será de a poco entonces, de a un disparo por vez... un asesinato por noche, un suicidio por mañana... así... hasta que ya no quede ninguno de nosotros, ni tu, ni yo, ni ello.

Morir... no, si es posible no terminar como un perro escapando a algún solitario rincón... no, es demasiado buena la Muerte, aún no soy merecedor de tal premio.

¿locura?... tal vez... por primera vez se siente todo tan claro... probablemente sea locura, probablemente.

Un mundo a bajo, un milímetro de ser arriba. ¿cuántas balas voy a necesitar?... demasiadas... demasiadas balas... de a una por vez, de a una por mes...

Ello... no soy ello... no soy ello... sagrada negación, única vía posible de escape... no soy ello, no soy ello.

Otro cigarrillo, el primer disparo... no soy ello, no soy ello... el frío de la calle, no soy ello, no soy ello.

Desolador paisaje... desolador... Hola muchachos... hola... no soy ello, no soy ello.



03 julio, 2013

Ella También

Ella también se consume en la pira de ansiedad que arde y arde en todas partes. Ni los rincones de su estudio, ni las páginas con olor a nuevo de sus libros, ni el te de jazmín, nada está a salvo de ese intenso mar de emociones, ansiedad, nuevamente esa palabra, ansiedad.

Si, si... todo llega  a su tiempo, pero esto solo es fácil de aceptar cuando no se tiene certeza alguna de ese tiempo, claro, es fácil suponer que aquél vendrá, escalará todas sus murallas y la llevara en los brazos hasta el centro mismo de la tierra, o del espacio, o de la tierra y el espacio...

Pero ahora, que su alma le susurra que el está tan cerca, que las uñas son presa fácil de sus dientes... ahora que puede presentir la primer oleada de se amor nuevo... ahora.. ¿qué va a hacer ahora?.

Se pasea de un lado a otro, se sacude las ansias, las dudas, los miedos... se le pegan de nuevo, se toma otro mate, escribe, llena el tachito de borradores arrugados, lee, vuelve a escribir..."que buen momento para volver fumar, ¿dónde habré dejado esas flores?" se dice, se desdice, se pregunta.

Por momentos se dice tonta, le cuesta tanto aceptarse sobresaltada por un simple sueño, por una charla a oscuras, por un presagio... piensa en el, en su calma y en lo bien que está viviendo este momento.

Supone, y eso supuestos atentan contra su calma, contra su buen humor, incluso hasta contra sus colores, camina de un lugar a otro... ¿cuánto falta?

Mientras tanto, el avanza despacio, escribe despacio, la piensa despacio... pero no por estar más tranquilo, sino porque su ansiedad tiene tanto sabor a miedo que debe andarla despacio para no asfixiarse en el primer sorbo de camino. Camina hacia ella, con los pocos recursos que tiene, cargado de dudas y peros... lleno  de versos que quiere compartirle, de besos que quiere robarle y de caricias que desea regalarle.

Ella en su desasosiego, el en el suyo y todas las hadas de los cuentos, y los duendes y los guías y las magias los esperan (de a ratos con cierta ansiedad), listos para escribir esta historia nueva, una vez mas, como tantas vidas atrás.

El camina despacio, con miedo... pero esta seguro de esos ojos con los que sueña cada vez mas seguido, tiene esa certeza de amor en la punta de los labios, puede reconocer su perfume, saborear su risa.. el esta dispuesto a llegar a su encuentro... ella también... ella también.





02 julio, 2013

Al menos por hoy.

Dicen que todo tiene su tiempo bajo el sol... Tal vez lo nuestro no sea la necesaria excepción a la regla.

Quizás, en algún rincón del vasto desierto que habitamos tu alma y la mía llevan tiempo (años, por qué no) mirándose a los ojos, reconociéndose, aguardando pacientemente a que nuestros cuerpos den el salto, nuestras manos se trencen, nuestros cuerpos se confundan y nuestras bocas se consuman a besos, dos o tres mates después.

O tal vez todo sea un sueño, quien puede decir que tus labios en mi boca, y que todo este presagio de amor no es mas que un andar descalzo por el pasto recién regado, o por la arena de alguna playa sin luna. cómo afirmar, es decir, cómo convencer a ese algo que me empuja hacia a ti como un hoja arrastrada por el Zonda  que tan bien conoces y que tan bien conozco, pero que de alguna manera, por eso de que "todo tiene su tiempo bajo el sol", no conocemos juntos aún.

Suena a fantaseo vil, a reclamo del alma, a hartazgo de soledades, pero no. Nada dista mas de una nausea matutina de dolor que este no se qué, que trato de plasmar en estas letras que cada vez me confunden mas, y me explican menos.

Tengo un deseo profundo de cruzar las arenas y el sol y de encontrarme con tus ojos, con tus manos en un libro, con tus anteojos sobre la mesa de luz (no se si usas anteojos), y con el mate amargo humeando de ternura, de anécdotas de viajes, espíritus y colores.

O tal vez no seamos mas que eso, un color, un pixel. Un soplido de ilusión que como viene se va, que como nace se muere, que como vive será mas o menos recordado.

Pero por qué... por qué me empecino en salir a buscarte, en recorrerme las calles, los teatros, las iglesias y los bancos de plaza con la absurda esperanza de que vas a estar ahí, armándote un cigarrillo (aunque yo soy el que arma los cigarrillos), bostezando de cara al sol, o regalando migas a las palomas, y a los niños que juegan con esas mismas palomas que tu alimentas.

Es absurdo...

Absurdo, no el escribirlo, no. No la maraña de canciones inconclusas y pensamientos retóricos del por qué y el qué se yo, no.

Lo absurdo es que yo estoy aquí, con mis ganas de vos, mientras vos estas allí con tus ganas de sabrá la Diosa qué, mientras este precario relato busca ser una excusa, una soga, tal vez un puente, para acercarme un poquito mas a ese lugar en el que estas, y consolarme las distancias al menos por ahora, al menos por hoy que soy demasiado cobarde para cruzar el desierto y salir a buscarte, al menos por hoy me queda en este absurdo el consuelo de que tu alma leerá este absurdo, y sonreirá, y se pasará la tarde oliendo a rosas y le dirá a mi alma que ya falta menos porque todo tiene su tiempo bajo el sol...